martes, 25 de febrero de 2014

Cronica de la Tercera Etapa de la Andalucia Bike Race 2014

Tercera Etapa de la Andalucia Bike Race 2014
Andujar-Andujar de 70,2 Km desnivel 2123m

Lo que mal empieza, mal acaba…

Comienzo teniendo mala noche y no se si sumando cabezadas, habré dormido media hora… no se el por que, pero no puedo conciliar el sueño, quizás la cena, no se… la cuestión es que no pego ojo en toda la noche, miro el reloj del móvil y el tiempo parece no avanzar…

Bueno, por fin son las 7 de la mañana, “me levanto” y empezamos a bajar trastos a la furgoneta antes de desayunar, ya que hoy la etapa es en Andújar y al termino de la misma nos vamos a Córdoba.

Como últimamente,  la salida la tomamos sin calentar, pero con mucho animo, ya que hemos pasado del puesto 75 en nuestra categoría del primer dia, al 51 del ayer…, por lo que salimos desde el stage 4, un poquito mas adelante.



Salimos a mil como siempre y Sanjo marca el ritmo, pasamos a más de 30-40 corredores en los primeros kilómetros. En el Kilometro 5 ya pasamos por un arroyo y nos calamos de arriba a abajo. Llegamos a una zona de colinas de roca y las caídas se suceden, la piedra resbala y hay que tener especial cuidado en no perder la rueda de delante. Quien me precede se va al suelo y al caer me tira el bidón, bueno... al menos no me he caído detrás de él.

Pasados unos Kilometros me doy cuenta de que además del bidón, también he perdido el portabidon.  pufff…..¡¡¡¡  eso significa que voy a depender de los avituallamientos y Sanjo para beber. Algo que marcaria el resto de la jornada.

Por la tensión de la carrera y por qué no hay tiempo ni de un pequeño sorbo, no bebo durante mucho tiempo y siento que me estoy deshidratando, en este momento comienzo a mendigar a Sanjo algo de agua, espero que nos sea demasiado tarde.
Recupero un poco y seguimos pasando a gente, la primera subida de la jornada es muy bonita, mucho pino y senderos técnicos. Llega un momento en el que creo que vamos muy bien colocados por el nivel de la gente que nos acompaña en el grupo. Quizás vamos entre los 30 primeros de nuestra categoría.

Llegamos a una bajada “chunga plus” y Sanjo me dice “joder macho, como has bajado esta¡¡¡”, creo que tengo tanto barro en las gafas que no veo el peligro. Sanjo si que va muy bien, sube, baja, llanea, es muy bueno en zonas técnicas… que voy a decir, es mi “compi”.
Voy mal, he tardado en beber, y  ya es muy tarde. Intento seguir la rueda de Sanjo y me cuesta una barbaridad, voy fundido.



Cruzamos otro de los multiples ríos y arroyos del dia, y el agua ya casi ni molesta. Incluso viene bien para limpiar un poco la cadena y el cambio, el barro hace que la cadena se agarre y se vuelve el cambio con el riesgo de partirlo o partir la patilla.
Parece que comienzo a sentirme mejor, incluso un espectador me brinda un bidón, y sin dudarlo lo cojo… (que cosas, en la serigrafía del bidón aparece una calavera, como las de “contaminado”), me lo voy a beber igual.

Ya recuperado plenamente, y de forma inesperada, en una subida a un cortafuegos, sufro el primer “chupe de cadena”,  me bajo rápidamente e intento llevarlo a su lugar, pero no soy capaz. Además me pongo nervioso, vamos muy bien situados y estamos perdiendo muchos puestos. Nada, el cambio se me queda bloqueado y no retorna, esta tan agarrado que no hay forma de llevarlo a su posición, por unos segundos vi el fin de nuestra aventura pasar por delante de nosotros. Pero de repente, Sanjo consigue llevarlo a su sitio y siento un gran alivio. “Venga, vamos¡¡¡” le digo “a por los que nos han pasado¡¡”, un par de pedaladas y de nuevo vuelvo a las andadas. El cambio se vuelve a bloquear, suspiro y lo suelto, me monto, y unas pedaladas mas tarde se repite la avería. No tengo aceite a mano, pero intento limpiar el cambio con el agua del bidón, lo que son las cosas… deshidratado y tengo que tirar el agua para limpiar la cadena.

Por unos kilómetros la avería parece resuelta, pero no, continuo con el problema, me desespero y hago muchas pruebas con los desarrollos, hasta que descubro que yendo “atrancao” con muy poca cadencia el cambio aguanta. Tirando mucho de riñones conseguimos llegar hasta la zona de avituallamiento un mirador con unas vistas impresionantes de la sierra, Alii encontramos un servicio de engrase, y limpiamos las cadenas y engrasamos, ahora si que si… que alivio.

Bajamos unas pistas de tierra a una velocidad endiablada mi velocímetro marca 60Km/h, a esta velocidad como me de una “galleta” ya no lo cuento. Veo frenadas que desaparecen en los barrancos, y se me ponen los pelos de punta.


Al final del descenso una trialera muy técnica que Sanjo pasa “sobrado” , intentaba seguir su ritmo cuando de repente, vuelve a bloquearse el cambio,  “Nooooo, me cagon ********** pario¡¡¡¡” Esta vez la avería es aun mayor el cable del cambio de plato se acaba de partir y la cadena se queda pillada entre los platos. Se acabó, ahora ya no hay solución,  se acabó la aventura de la Andalucia Bike para nosotros, ya pienso en como decir a Sanjo que siga y que disfrute de lo que queda, ya me buscare la vida. Una pena llegar hasta aquí y terminar de esta manera.



Perdemos mas de 15 minutos en lamentarnos, pero quiero intentar seguir aunque sea forzando la cadena, el cambio o lo que haga falta. Se lo que significa para Sanjo este reto y no quiero defraudarle.

Sacamos la cadena y conseguimos montarla provisionalmente sobre dos coronas, tengo que hacer el resto de etapa con plato pequeño y piñones del 11 al 15, con muy poco cadencia, tirando de riñones y por si esto fuera poco, tendré que subir todas las subidas a pie, “solo me falta llevar una rueda frenada para hacerlo mas difícil todavía” y aun quedan 35km de etapa.



Llegamos a la subida mas dura del día, un monte de pista ancha de unos 6 Km con badenes con un porcentaje próximo al 20%, cojo el manillar y comienzo a patear, es muy duro subirlo en bici, pero subirlo a pie, con unas babuchas y la bici de la mano es inhumano. A falta de 1Km, Sanjo me ve tan mala cara que se presta a llevar su bici y la mía durante un rato.

Por fin llegamos arriba, yo llego completamente destrozado, no tengo aliento y moralmente hundido, quedan más de 25 km y tengo que ir con la bici de la mano la gran mayoría de ellos. Pienso en abandonar, llamar algún numero de la organización o como mucho quedarme en el próximo avituallamiento que esta a 9 Km.
Llevo tanto andado con la bici a cuestas que tengo un dolor insoportable de espalda, Sanjo como siempre no se separa de mí ni un instante.

Las bajadas se suponen que son un alivio, pero nada mas lejos de la realidad, voy tan mal que no tengo reflejos y pierdo habilidad, las bajadas son espectaculares por lo que dice Sanjo, pero yo no veo nada de atractivo en ellas. No disfruto de estos momentos e incluso comienzo a tener miedo en las bajadas, cometo muchos errores y estoy a punto de irme al suelo en varias ocasiones.

Durante los 10 últimos Kilometro voy tan “reventao” que no cruzo ni una sola palabra con Sanjo. Solo estoy deseando llegar a meta, me da igual todos los corredores que nos pasan, son los 10Km mas largos que he sufrido nunca.

Pasadas las 3 de la tarde llegamos a meta con un tiempo de 5:05:40. Al mirar el reloj veo que el pulsometro marca 4130 Calorías consumidas.

Calculo que de los 70Km de etapa he “andado” mas de 15 Km.


Son las 22:00 Horas, tengo un dolor lumbar insoportable  y aun no se si podre salir mañana.

2 comentarios:

  1. Manu....podeis con eso y con mas... Piensa en que historia mas bonita vas a dejar atrás.... Aun no se ha inventado xo te mando mia fuerzas para q continues a través de estas palabras.... Podeis amigos Podeis.... Descansa y a por todas

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  2. Solo los débiles de mentalidad abandonan, un triatleta como tu es capaz de superarlo y así ha sido.

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